Cuando se tiene un negocio basado en una imagen o palabras que nos distingue de los demás, lo mejor es tener protegida esa imagen contra terceros.

La marca, como es conocida la imagen personal o comercial, que se constituye por imágenes o palabras, en ocasiones son frases, que las personas usan, como su nombre, una frase o imagen que identifica lo que hacen. Las personas vendemos bienes o servicios, y en ese tráfico comercial nos identificamos con los consumidores, ya sea para bien o para mal. Cuando una persona natural o jurídica logra identificarse en el mercado y sobre salir se dice que tiene una marca personal que la identifica. Así por ejemplo podemos mencionar a grandes como adidas, nike, coca-cola, y otros. Cada uno de estas marcas en sus inicios nada se sabia de ellas. Pero con los años y con la consistencia y la calidad de sus productos, han logrado destacar.

La importancia de tener protegida nuestra marca, radica en la idea de crecimiento de ésta, tal como se ha mencionado. En algún momento nuestra marca se volverá famosa, será conocida por muchas personas; lo que puede resultar que otra persona que venta los mismos productos o servicios plagie tu imagen. Para evitar este plagio, la marca debe ser registrada, lo que garantiza un derecho sobre esta. 

Este derecho para mí, contrario sensu, obliga a los demás vendedores de productos o servicios, a no usar mis símbolos distintivos. Existen castigos en las Leyes por usar la marca que no me pertenece.

También puede suceder, que mi marca después de que la he destacado, otra persona la registra y ya no podré utilizarla, lo que sería una perdida, ya que tendría que cambiar mi marca por otra y comenzar desde cero a darle el valor comercial que ya tenia la anterior.

Es recomendable que antes que comiences a usar una frase o imagen, verifiques en el Registro de Marcas si no hay una idéntica ya inscrita.